A 20 años de Kirchner presidente: sus desembarcos en el Imperio

De pronto, se escucha el sonido de un avión que sobrevuela sobre la sede deportiva de avenida España y las especulaciones sobre su llegada se echan a rodar.

Pasaron unos 20 minutos y ante el masivo público presente hizo su aparición Néstor Kirchner.

Era su cuarta y última visita a la ciudad de Río Cuarto, declarada capital alterna de la Provincia por José Manuel de la Sota, quien estaba allí presente en su condición de gobernador de Córdoba.

También en el escenario apareció Cristina Fernández de Kirchner, como primera dama, y el por entonces intendente Benigno Antonio Rins.

En la oportunidad, se declaró de utilidad pública la autovía Córdoba-Río Cuarto y se prometieron obras para la ciudad.

También hubo un párrafo aparte para la causa judicial del atentado contra la Fábrica Militar de Río Tercero:Kirchner prometió ese día hacer justicia con la sociedad riotercerense.

En ese desembarco oficial, de los cuatro que hizo Kirchner en Río Cuarto, el romance de la gente con Kirchner estaba intacto.

Sin embargo, el conflicto con el campo por la 125 distanció a los riocuartenses del matrimonio presidencial hasta convertirlo, al día de ho y, en un bastión antikirchnerista, en sintonía con la provincia de Córdoba.

Pero la primera incursión en la ciudad fue en el año 2002 cuando Kirchner estrenaba el traje de precandidato a presidente por el Partido Justicialista.

En ese rol, encabezó un acto en las instalaciones de la Sociedad Española, con un centenar de dirigentes y militantes. Por aquel entonces, Néstor era un político desconocido por estas latitudes.

Pasó un año, y en el 2003, bajo una lluvia torrencial, Kirchner presidió otro acto de campaña, en su carrera por llegar al Sillón de Rivadavia, en el Viejo Mercado.

Allí fue mucha más gente que la que se congregó en la Sociedad Española un año atrás.

El precandidato presidencial durmió en la ciudad. Al día siguiente, atendió medios, entre ellos a Puntal, y se reunió con dirigentes justicialistas. Yluego emprendió el regreso.

En el desembarco del 2006, de los cuatro que hizo Kirchner en Río Cuarto, el romance de la gente con Kirchner estaba intacto. Sin embargo, el conflicto con el campo por la 125 distanció a los riocuartenses del matrimonio presidencial hasta ser un bastión antikirchnerista.

En las elecciones del 27 de abril del 2003, Carlos Menem sacó el 24 por ciento de los votos y Kirchner el 22 por ciento, los dos más votados en esa presidencial, que pasaron a la segunda vuelta.

Pero Menem, intuyendo una contundente derrota, se bajó y Néstor fue proclamado presidente, asumiendo dicho cargo el 25 de mayo del 2003.

Ese mismo año, Kirchner hacía su primera visita oficial a la ciudad como primer mandatario pero la tercera en su totalidad.

En septiembre, los riocuartenses salieron a las calles con banderas argentinas para recibir al flamante presidente, que fue trasladado en un vehículo oficial desde el Aeropuerto Río Cuarto al Palacio Municipal.

Allí, en la explanada y ante una multitud que colmó la Plaza Olmos, Kirchner prometió hacer represas en el sur provincial. De la Sota y Alberto Cantero, intendente en esa época, lo escuchaban atentamente.

El por entonces presidente representaba la esperanza de una sociedad que venía desahuciada después de la crisis del 2001 y del que se vayan todos.

Fiel a su estilo, Néstor se fundió en un cálido saludo con el público presente, emprendiendo luego la vuelta a Buenos Aires, por la puerta de Hipólito Yrigoyen del Palacio Municipal.

Marcelo Irastorza. Redacción Puntal

Fuente: Puntal.com.ar

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