El G7 abrió su cumbre con la mirada puesta en China y Rusia y mañana recibe a Zelenski
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, asistirá en persona a la cumbre del G7 en Hiroshima, en Japón, donde los mandatarios de las principales potencias occidentales anunciaron nuevas sanciones contra “la maquinaria de guerra” rusa.
“Se van a decidir cosas muy importantes, y por eso la presencia de nuestro presidente es absolutamente esencial para defender nuestros intereses”, afirmó el secretario del Consejo de Seguridad ucraniano, Oleksii Danilov.
Zelenski, quien últimamente desplegó una intensa actividad diplomática en busca del apoyo militar para lanzar una contraofensiva contra Rusia, debía intervenir por videoconferencia en la cumbre de Hiroshima, que cerrará mañana. Finalmente asistirá en persona.
El mandatario ya partió de Ucrania y ayer hizo una escala en Arabia Saudita, para participar en una cumbre de la Liga Árabe y entrevistarse con el príncipe heredero saudita Mohamed bin Salmán, quien mantiene estrechas relaciones, tanto con Rusia como con China.
Al hablar ante la cumbre, Zelenski acusó a “algunos” líderes árabes de no ponerse del lado de Ucrania en la guerra en curso en Europa del Este. “De-safortunadamente en el mundo, e incluso entre ustedes, hay algunos que han cerrado los ojos ante estas prisiones y anexiones ilegítimas”, dijo el mandatario ucraniano en la 32° cumbre de la Liga Árabe en Jeddah, Arabia Saudita.
Zelenski luego pidió a los líderes árabes que asistieron a la cumbre de la Liga Árabe que “consideren con honestidad” el conflicto en curso en Ucrania.
En tanto, el jefe de la oficina del presidente ucraniano, Andriy Yermak, al referirse a la reunión de Zelenski y el príncipe heredero saudita, dijo que el mandatario “invitó a Muhammad bin Salman a visitar Ucrania y le agradeció por haber apoyado la soberanía y la integridad del territorio de Ucrania”.
En la cumbre. En Japón, se espera que Zelenski podrá renovar su pedido de aviones caza para reconquistar territorios tomados por Rusia después de la invasión de la exrepública soviética en febrero de 2022.
Varios países europeos, como Reino Unido y Países Bajos, anunciaron el fin de semana que trabajarán para que Ucrania reciba aviones F-16, aunque la eventual entrega de esos aparatos estadounidenses debe ser autorizada por Washington.
En Hiroshima, ciudad víctima del primer bombardeo atómico de la historia, en 1945, los dirigentes del G7 (EE.UU., Canadá, Japón, Francia, Reino Unido, Alemania e Italia) anunciaron un endurecimiento de sus sanciones contra Rusia y expresaron preocupación por aumento del armamento nuclear chino.
“La aceleración de la acumulación de arsenal nuclear por parte de China sin transparencia ni diálogo significativo plantea una preocupación para la estabilidad mundial y regional”, indicó el G7 en un comunicado que también condenó la “retórica nuclear irresponsable” de Rusia.
El grupo anunció medidas para “privar a Rusia de la tecnología, el equipamiento industrial y los servicios del G7 que sostienen su maquinaria de guerra” en territorio ucraniano. El paquete incluye restricciones a las exportaciones de bienes “críticos para Rusia en el campo de batalla”, así como medidas contra entidades acusadas de llevar material al frente en beneficio de Moscú.
Horas antes, Estados Unidos anunció que restringiría el acceso de Rusia a “productos necesarios para sus capacidades de combate”, mediante la prohibición de exportaciones a setenta entidades rusas y de otros países.
Diamantes. Reino Unido y la Unión Europea anunciaron por su lado restricciones contra la industria del diamante ruso, cuyo comercio está valorado en 4 mil a 5 mil millones de dólares anuales y supone una importante fuente de ingresos para el Kremlin.
En su comunicado, el G7 se comprometió igualmente a “restringir el comercio y el uso de diamantes extraídos, tratados o producidos en Rusia”, haciendo uso para ello de las tecnologías de seguimiento.
Emiratos Árabes Unidos, India y Bélgica, miembro de la UE, figuran entre los principales importadores de diamantes rusos.
Los dirigentes del G7 podrán presentar directamente sus argumentos en favor de esta medida al primer ministro indio Narendra Modi, cuyo país mantiene relaciones militares estrechas con Rusia y se negó a condenar la invasión de Ucrania. India, junto con Brasil e Indonesia, forman parte de los ocho países no integrantes del foro que fueron invitados a Hiroshima.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, mantuvo en la ciudad japonesa una primera bilateral con el primer ministro australiano, Anthony Albanese.
“Hablamos de la ampliación de las relaciones Brasil-Australia, del Mundial de fútbol femenino (previsto en Australia y Nueva Zelanda en julio y agosto), y recibí una invitación para visitar Australia”, indicó Lula en su cuenta de Twitter.
Homenaje. Más allá de Rusia y Ucrania, la agenda estará dominada por China y la cuestión de la diversificación de las cadenas de suministro de los países del G7, para protegerse del riesgo de “coacción económica” por parte de Pekín.
El jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz, llamó a pensar las cadenas de suministro de manera que se limiten “los riesgos por la dependencia respecto a determinados países”, aunque Francia matizó que éste será “un G7 de cooperación y de exigencia respecto a China”.
Antes de iniciar la cumbre, el primer ministro japonés Fumio Kishida, oriundo de Hiroshima, recibió uno a uno en el Parque del Memorial de la Paz a los otros seis dirigentes del G7. Juntos rindieron homenaje a las 140 mil víctimas de la bomba atómica estadounidense el 6 de agosto de 1945.
También te puede interesar
Fuente: Perfil