Hay diferencias notables en las perspectivas de la cosecha de soja

En Argentina, las labores de siembra de soja llegan a su tramo final, con un avance del 93% de los 16,5 millones de hectáreas a sembrar estimadas por la Secretaría de Agricultura de la Nación. El USDA y las bolsas de cereales presentan notables diferencias en cuanto a la producción estimada.

La escasez de precipitaciones y las altas temperaturas provocaron un deterioro en las reservas hídricas, generando un impacto negativo sobre los rendimientos potenciales y un retraso de 3 puntos porcentuales respecto al promedio de las últimos 5 campañas.  Si bien en los últimos días se registraron precipitaciones que podrían mejorar la situación, ya se cuentan daños irreversibles en algunas zonas, principalmente en los cultivos implantados de manera temprana.

En este escenario, el USDA, la Bolsa de Comercio de Rosario y la Bolsa de Cereales de Buenos Aires redujeron sus estimaciones de producción. En el caso del organismo norteamericano el recorte fue de 4 millones de toneladas, mientras que la estimación del organismo rosarino fue más pesimista y la redujo en 12 millones de toneladas, ubicándola en 37 millones de toneladas, el valor más bajo de las últimas 5 campañas. La Bolsa porteña ubicó la cosecha de soja en un valor intermedio de 41 millones de toneladas, recortando en 7 millones de toneladas respecto a la estimación previa.

Fuente: BCCBA en base a BCR, Bolsa de Cereales de Buenos Aires y USDA

El pulso de la soja en Brasil

La siembra de soja de la campaña 2022/23 prácticamente ha finalizado en Brasil con una superficie récord de 43,5 millones de hectáreas e incluso la cosecha ya ha comenzado en algunas zonas, con un avance promedio en torno al 1%.

De acuerdo con datos de la CONAB, el clima seco que atravesaron algunas regiones productoras en las últimas semanas provocó una caída en el rendimiento esperado, pasando de 35,4 quintales por hectárea en diciembre a 35,1 quintales por hectárea en la última estimación. De esta manera, la cosecha alanzaría los 152,7 millones de toneladas, aunque 765.000 toneladas por debajo de estimado en diciembre. Más allá del recorte, sería la producción más elevada en la historia. En relación con las exportaciones brasileras, tanto el USDA como la CONAB, esperan que las mismas sean récord con volúmenes esperados de 91 y 94 millones de toneladas respectivamente, destacó el informe publicado por la Bolsa de Cereales de Córdoba.

Un mercado muy activo

A los primeros días de enero, y luego de finalizada el segundo Programa de Incremento Exportador que establecía un tipo de cambio diferencial más elevado para las exportaciones de soja, se llevan comercializadas 35,4 millones de toneladas de soja en el mercado argentino, equivalentes al 81% de la producción del ciclo 2021/22 (83% es el promedio de las últimas cinco campañas) que se situó en 44 millones de toneladas. Este guarismo es casi 1,2 millones de toneladas inferior a lo comercializado a igual fecha del año anterior, básicamente por la caída en la producción. De la nueva campaña, 2022/2023, las compras de industriales y exportadores a la fecha son por 2,7 millones de toneladas, 2,2 millones de toneladas menos que a igual fecha del año previo, como consecuencia de una menor cosecha esperada.

La soja y el maíz en Brasil y Argentina continúan sufriendo los efectos de la sequía, lo cual se ve reflejado en menores rendimientos y, por lo tanto, en menores volúmenes de producción. En este contexto, los precios en el mercado internacional encuentran sustento, aunque mayores tasas de interés a nivel global y un menor crecimiento por parte de China limitan las posibilidades de crecimiento. Por otro lado, incertidumbre respecto a las exportaciones de granos por parte de Rusia incorporan un ingrediente alcista a los valores de los commodities.

Fuente: Todo Agro

Redacción